Nació el 12 de junio de 1919, en Asunción, Paraguay. Hija de Magno Tristán Torres y de María Raquel Lara. En la Escuela Normal Mixta de Maestros "Manuel Leiva" de Casilda, Prov. de Santa Fe, realizó los estudios secundarios y el 30 de noviembre de 1940 egresó con el título de Maestra Normal Provincial.

Comenzó su carrera docente en la Escuela Nº118 de La Matanza, Chaco, en el año 1945. Logró su traslado a Las Breñas. El 13 de septiembre de 1948 se hace cargo de un grado de la Escuela Nº77.

A fines de 1950 tuvo la feliz idea de promover la creación de una escuela de enseñanza media para todos aquellos jóvenes que no podían ir a otras ciudades para continuar los estudios secundarios. En 1951 hizo una encuesta domiciliaria, primeramente sola y luego acompañada por su colega, la Sra. Manuela Canteros de Ortega, que dio como resultado una larga nómina de adolescentes y jóvenes deseosos por proseguir la instrucción pública. Esto motivó a que se formara una Comisión Promotora para llevar a cabo las gestiones pertinentes.

El 2 de abril de 1952 el Instituto Secundario de Las Breñas, adscripto al Colegio Nacional de Presidencia Roque Sáenz Peña, comenzó a funcionar en el edificio de la Escuela Alemana (Unión Germánica Argentina).

El 31 de marzo de 1954 el Gobierno Provincial oficializó, por Decreto Nº677/54, a la Escuela Normal Mixta Provincial Nº1, de Las Breñas, dando lugar para que en el año 1956 egresara la primera promoción de Maestros Normales Breñenses.

Desde el 4 de septiembre de 1952 hasta el 10 de abril de 1954, la señorita Torres Lara se desempeñó como Secretaria del establecimiento, sin dejar sus tareas de maestra de grado en la escuela primaria. Y desde 1955 hasta 1968, estuvo al frente de distintos cursos con las cátedras de Geografía, Castellano, Matemática, Botánica, Historia, Política Educacional, Literatura, Filosofía y Psicología Pedagógica. En forma simultánea ejerció el cargo de Maestra de Grado en el Departamento de Aplicación, hoy Escuela Nº195. En 1964 propuso al Consejo General de Educación algunas reformas al Currículo de Castellano para la escuela primaria y el ciclo básico, consistente en la aplicación de libros de autores chaqueños o considerados como tales. Sostenía que con ejercitación de lecturas relacionadas a distintos aspectos de nuestra región se lograría un conocimiento más profundo de nuestra provincia.

En 1965 fue presidenta de la comisión directiva de Legislación en el Primer Congreso Pedagógico–Administrativo  de Docentes Secundarios de la Provincia del Chaco.

En 1966 presentó a las autoridades un "anteproyecto" modificando la práctica de los exámenes, sistema de evaluación e integración de las mesas examinadoras. Fue aprobado el trabajo y ha sido éste similar al que rige hoy por objetivos.

Docente de alma y con marcada virtud de iniciativas, proyectaba e impulsaba a los demás en llevar a cabo lo que la comunidad necesitaba por elevar la cultura. Notó que por la indigencia o la abulia muchos jóvenes no habían completado la escuela primaria, y que entre las personas adultas existía un alto porcentaje de analfabetos. Por tal motivo, en julio de 1954, después de ver hecha realidad la creación de la escuela secundaria, se propuso alcanzar su aspiración en instituir una escuela para adultos, y el programa tentativo en montar una fábrica de dulces regionales.

En el mismo local de la Escuela Normal, en horario nocturno inscribió a doscientos jóvenes y adultos que concurrieron regularmente a clases alfabetizadoras. Poco tiempo después se oficializó la primera Escuela para Adultos de esa localidad. El proyecto de la industria de dulces no prosperó; pero sirvió como idea base y se aplicó con éxito en otro lugar del Chaco años después.

Fue bibliotecaria de la Biblioteca Pública Gobernador Mac Lean de la Cooperativa Agropecuaria Las Breñas. Se recuerda que su atención fue perseverante y actuaba con deferencia hacia quienes frecuentaban a beber conocimientos, ofreciendo con rapidez los libros adecuados y/o solicitados.

Vivió preocupada por las posibilidades que se debían ofrecer a la juventud y a los marginados. Creó en el Barrio Urquiza un centro de catequesis, donde enseñaba también corte y confección, que funcionaba en el sótano del escenario del Club Atlético Huracán, dando verdadero testimonio de austeridad, humildad y amor al prójimo. Como auténtica cristiana practicante escogió la misión no sólo de enseñar, sino también de ayudar a los niños carenciados, hombres alcohólicos, ancianos y lisiados.

Falleció en la Capital Federal, el 1 de julio de 1989, a la edad de setenta años.

• Por Resolución Nº45 de 30 de julio de 1996, del Ministerio de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología, se impuso el nombre de "Zoraida Alicia Torres Lara" a la Escuela Primaria Común (E.G.B.) Nº195, de Las Breñas, (ex Departamento de Aplicación de la Escuela Normal), propuesto por el Consejo Municipal de la misma ciudad.

Fuente: -Hombres y Mujeres que Hicieron Chaco- de Lidia Polich de Calvo.