Nació en Villa Estanzuela (San Luis) el 12 de abril de 1862. Hijo de Bernabé Díaz y María del Señor Garro, chacareros del lugar.

Aprendió las primeras letras en una escuela particular. Cursó el magisterio y el profesorado en la Escuela Normal de Profesores de Tucumán, distinguiéndose como estudiante sobresaliente.

Comenzó su carrera educativa y literaria como redactor del periódico "Tucumán Literario"; vocal y secretario de la Sociedad Sarmiento y profesor de la Escuela Normal de Adultos, creada por esta sociedad.

Entre 1885 y 1886, en San Luis, ejerció el magisterio en la escuela graduada de Villa Mercedes.

En 1886 volvió a Tucumán para desempeñar en la Escuela Normal las cátedras de Geometría, Trigonometría y Agrimensura, hasta marzo de 1889. De allí pasó a la vicedirección de la Escuela Normal de Salta.

En 1890, al crearse la Inspección General de Escuelas de Territorios, fue designado titular del cargo, que desempeñó desde el 25 de mayo de ese año, hasta el 16 de agosto de 1916, fecha en que renuncia para obtener su jubilación.

El 20 de octubre de 1901, siendo Inspector General de Escuelas de Territorios y Colonias, concretó su iniciativa de crear la primera Biblioteca Escolar Popular, en la Escuela Nº1 "Benjamín Zorrilla", con la base de libros que había donado el Gobernador General Obligado y apoyado con mucho entusiasmo por el Gobernador en ese entonces, Coronel Enrique Luzuriaga.

En 1909 envió una valiosa donación de libros para incrementar la biblioteca.

En gira de inspección vio la pobreza de las escuelas, y apoyando la obra de los docentes y comunidad, colaboró enviando útiles escolares, muebles, etc. En una de sus giras vio la necesidad de crear una escuela en Colonia Benítez. Gracias a sus gestiones se creó la Escuela Nº10.

El profesor Raúl Basilio Díaz fue el gran propulsor de la enseñanza primaria en los territorios nacionales que recorrió en sus numerosos viajes de inspección, observando la naturaleza y caracteres de cada región y estudiando el problema educativo y social de la población. De acuerdo a las informaciones recogidas, propuso y llevó a la práctica soluciones inmediatas. Al hacerse cargo de sus funciones existían 36 escuelas en su jurisdicción; al retirarse, habían 400.

De 1907 a 1908 viajó por los Estados Unidos de Norte América, donde estudió especialmente la organización de las escuelas rurales y la educación de los indígenas.

Después de su renuncia al cargo de inspector, no ocupó cargo alguno.

Su obra escrita está relacionada con su gestión como funcionario y su labor como maestro. En su época se construyeron doscientos edificios para escuelas. Propugnó la adaptación regional de los planes y programas de estudios en las escuelas de territorios; también se preocupó por la formación y el perfeccionamiento del maestro de los territorios.

Publicó "La Educación en los Territorios y Colonias Federales" que contiene sus informes de inspección, en cuatro volúmenes.

Falleció en Buenos Aires, el 6 de diciembre de 1918, a los 56 años.

• El 27 de agosto de 1930, en homenaje al Inspector General de Escuelas que tanto luchó por la educación de los territorios, se denominó "Raúl Basilio Díaz" a la Escuela Primaria Nº2 al inaugurarse el edificio actual.
• La Asociación Cooperadora de esta escuela y una calle de Resistencia también llevan su nombre.

Fuente: -Hombres y Mujeres que Hicieron Chaco- de Lidia Polich de Calvo.