En 1914, al mando del Destacamento 7 de Caballería, llegó a Presidencia Roque Sáenz Peña para reemplazar al Regimiento 6, en la protección de las vidas y haciendas de los pobladores.

El Regimiento estuvo hasta 1915. El Capitán Gómez ofreció enseguida ayuda y amistad a los pobladores.

Una vez retirado del ejército, siguió siendo vecino de esta localidad hasta su fallecimiento.

Se preocupó en peticionar ante el Gobierno, junto a otros vecinos, la instalación de la Estación del Ferrocarril en el km 173, ya que la Administración del Estado (por desconocer el lugar) había determinado ubicarla en el km 177.

El Gobernador Oreste Arbó y Blanco lo designó Comisario General, cuya función era –además de la específica– vigilar la disciplina de los naturales. El personal policial era reducido para el intenso y peligroso trabajo. La presencia de un jefe militar al frente de las fuerzas del orden inspiraba respeto a los naturales.

Se desempeñó también como encargado de tierras, que comprendía la distribución de posesiones a los agricultores que llegaban para trabajar. Ello requería experiencia y especial conocimiento de los emplazamientos, en general desconocidos.

El Capitán Gómez orientó a los vecinos a mejorar la calidad de vida local y se ocupó también del desarrollo del pueblo.

Era entusiasta cultor de las manifestaciones deportivas, impulsándolas. Fue instructor de tiro.

Estaba casado con Antonia Refojo. Tuvo cuatro hijos.

Falleció en Presidencia Roque Sáenz Peña.

• Una calle de esta ciudad lleva su nombre en justiciero homenaje.

Fuente: -Hombres y Mujeres que Hicieron Chaco- de Lidia Polich de Calvo.